domingo, 10 de julio de 2016

Lo que digas te será hecho


"En tu boca hay poder de vida y de muerte" Proverbios 18:21

Jesús lo expresó de esta manera "Lo que digas te será hecho" (bueno o malo).
Somos inconscientes de la verdad tan importante que está contenida en estos versículos. Juan dice claramente en el capítulo uno que todas las cosas son hechas por la palabra y que además todo lo creado cobró vida por la palabra.

No nos damos cuenta que nosotros activamos a través de la fe y la revelación de la voluntad de Dios, lo que El tiene para nosotros. Por nuestras palabras somos justificados o condenados. Nosotros nos encargamos de justificar el plan de Dios o de condenarlo en nuestras vidas.

Incluso una oración eficaz depende de la manera como la eleves al Reino. Muchas personas están acostumbradas a hacer oraciones de derrota en lugar de victoria.

"Señor transforma las palabras que salen de mi boca. Yo renuncio a palabras de derrota, de inseguridad, cargadas de incredulidad, llenas de temor, de angustia y desesperación. Haz conmigo lo que hiciste con el profeta Jeremías cuando le dijiste "he puesto mis palabras en tu boca". Que yo pueda ser tu portavoz y que todo lo que salga construya y plante. Que mis palabras sean semillas que den frutos buenos en mi tierra y en la tierra de otros, pues estamos llamados a bendecir (bien-decir) y no a maldecir (mal-decir). Gracias Señor porque estás cambiando mi manera de hablar"



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