sábado, 25 de junio de 2016


«No prevalecerá ninguna arma que se forje contra ti. Toda lengua que te acuse, será refutada. Esta es la herencia de los siervos del Señor, la justicia que de mí procede. Afirma el Señor» Isaías 54:17

Dios cuida y protege a sus siervos. Su palabra dice «ay de aquel que se mete con uno de mis ungidos». Quienes operan desde las tinieblas no entienden que Dios defiende a sus hijos y a sus siervos. No tengas temor si se han levantado armas en tu contra o lenguas mentirosas de personas con intenciones de desprestigiarte o aún para limpiar las acciones de ellas mismas. Hay algo real, sus lenguas podrán engañar a los demás, pero a Dios no. Podrán obtener el favor de las personas, pero perderán el de Dios. El sabe cuál es las verdad, no te desestabilices, sigue tu camino, sigue haciendo lo que sabes hacer y lo que Dios te ha mandado a hacer, deja todo en manos de Dios, porque a pesar de que El es bueno también dice «mía es la venganza yo pagaré» Cada quien recibe la recompensa de lo que hace.

Sólo pon los ojos en el Señor, has lo que Jesús hacía con los fariseos les decía sus verdades e ignoraba su necedad. Caminaba en paz porque sabía a quien estaba unido y a quien servía.

El enemigo sabe usar personas muy cercanas a ti para dañar tu camino, pero no dejes que las emociones o los sentimientos le den la victoria al enemigo. Nuestra lucha no es con carne ni sangre, si no contra potestades y entidades de las tinieblas. Concéntrate en quien es el poder, la gloria, honra y justicia... verás como cada quien recibe lo que Dios tiene para darles.

No hay comentarios:

Publicar un comentario