martes, 20 de septiembre de 2016

El viene a sorprenderte

«Hablen con cariño a Jerusalén, y anúncienle que ya ha cumplido su tiempo de servicio, que ya ha pagado por su iniquidad, que ya ha recibido de la mano del Señor el doble por todos sus pecados.
3 Una voz proclama: «Preparen en el desierto un camino para el Señor; enderecen en la estepa un sendero para nuestro Dios. 4 Que se levanten todos los valles, y se allanen todos los montes y colinas; que el terreno escabroso se nivele y se alisen las quebradas. 5 Entonces se revelará la gloria del Señor,
y la verá toda la humanidad. El Señor mismo lo ha dicho.» Isaías 40: 2-5.

El Señor sabe que en este momento el pueblo necesita consuelo. La Escritura que el Señor nos comparte hoy describe claramente un terreno bien difícil de transitar. Se habla de desiertos, de colinas, de montañas. Lo que implica un camino complicado, largo y que cansa.

El Señor sabe que estás cansad@, sabe que ha sido duro este tiempo, sabe que incluso has andado por rutas desconocidas por obediencia, pero que a veces te has visto tan perdid@, que llegaste a pensar que tomaste la vía equivocada. Has visto tanta dificultad y tanta montaña de imposibilidad que has querido renunciar. Los alrededores te han influenciado tanto en tus emociones que has llegado al límite de tu avance.

Pero el Señor nos enseña, que en este tipo de camino, es donde realmente se manifiesta su gloria. Y El que es dueño de los tiempos, dice claramente en esta porción bíblica que se ha cumplido el tiempo. Se terminó el entrenamiento. Ya se cumplió el propósito de tu transitar por esta vía. Lo que el Señor quería hacer contigo ya lo logró. El Señor ha ordenado que le preparen el camino, porque viene a mostrar su gloria en tu vida.

El viene a sorprenderte. El viene a mostrarte que valió la pena el largo viaje. El viene a decirte «no me he olvidado de ti». El viene a revelarse en tu vida. En esa área específica que se convirtió en un desierto es ahí donde se glorificará. En esa situación especial que te tuvo en agonía. El viene a manifestar su poder en lo que es imposible para ti. El viene a mostrarle a este mundo que lo desconoce por completo que El si existe y se manifestará a través de ti. Tu serás su gloria. Tu serás el asombro de los que te vean. Tu serás el testimonio real y vivido de lo que realmente es Dios. Tu serás su manifestación en esta tierra.

Este mundo ignorante del Dios creador del cielo y de la tierra, cerrará su boca, abrirá los ojos y volverá su corazón al Dios que conquistaste en tu camino, en tu viaje. Tu no sólo conquistaste con tu dolor y sufrimiento una recompensa para ti, si no que Dios usará tu vida para que otros se acerquen a El y reconozcan que hay un Dios y es tu Dios.

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